A juzgar por el aspecto que tiene este apartamento ahora, es difícil creer que fue construido en 1915. Ahora presenta un estilo moderno de mediados de siglo que incorpora armoniosamente una serie de elementos modernos y clásicos. Observe las líneas simples, los muebles elegantes y la paleta de colores equilibrados, que incluyen tonos neutros y tonos vibrantes que hacen que la decoración se destaque.
Piezas de muebles icónicos se pueden ver en todo el espacio. La mesa Noguchi es el centro de atención en la sala de estar y se complementa con la silla clásica y la mesa auxiliar elegante.
Me encanta lo informal que es la decoración a la vez que luce elegante. La pintura descansa contra la pared en lugar de montarse en ella y el piso tiene un acabado y un color muy agradables.
Las habitaciones no son particularmente amplias, pero la falta de espacio llevó a los arquitectos a pensar fuera de la caja.
El dormitorio tiene un baño en suite y la pared que los divide fue parcialmente demolida. Ahora los dos están conectados y la habitación se siente más espaciosa.
Este tipo de diseño se ve a menudo en las cocinas que están conectadas de esta manera al espacio vital. Aquí fue utilizado en un entorno inusual, pero para los mismos fines.
Los estantes abiertos están bellamente adornados con elementos decorativos y prácticos.
El color principal utilizado para el interior es el blanco. Es una opción estratégica, ya que hace que la habitación parezca más grande, más aireada y espaciosa. Combinado con los suelos de madera, el ambiente es fresco y acogedor.
Y donde el color no era suficiente, se usaron otros trucos. El pequeño baño tiene puertas de gabinete con espejo grande que agregan profundidad al espacio y el toque verde es fabuloso.
Es interesante que las plantas fueran utilizadas para decorar los baños. Son una buena manera de agregar algo de color a la habitación, lo que la hace sentir fresca y elegante, además de que son excelentes purificadores de aire.
Lo que parece haber sido un balcón de algún tipo no es un comedor muy bonito y luminoso. Un uso muy inteligente de este espacio y una forma de obtener una habitación extra.
Me encanta el jardín vertical. Los estantes encajan perfectamente en la pared y es genial que también sirvan como estanterías para un poco de contraste.
