Es muy difícil no afectar un lugar antiguo y sus alrededores cuando se construye uno nuevo. Es aún más difícil cuando el espacio antiguo es un castillo del siglo XIV, el pabellón Castell D'emporada, ubicado cerca de una ciudad llamada La Bisbal, cerca de Girona, España, y el nuevo es una enorme terraza.
Se dice que la familia Margarit es la propietaria del castillo hasta 1999, cuando se transformó en un hotel boutique. Además del restaurante existente, hay una gran terraza, que ofrece excelentes vistas sobre el paisaje circundante. En la terraza, se colocaron al azar 12 círculos en diferentes diámetros, en un intento de mantener el antiguo edificio intacto y, al mismo tiempo, mantener la misma sensación de encontrarse en un ambiente exterior en la terraza.
Las columnas y el techo de acero pintado de blanco proporcionan una de las perspectivas más importantes, un ambiente exterior abierto y ligero bajo las sombrillas. Las mesas redondas y cuadradas de mármol y los dos sillones de cuero ofrecen diferentes asientos. Todo parece una gran área de reunión, la parte antigua se mantuvo intacta, fue la intención del diseñador y el resultado es muy satisfactorio, todo se combina perfectamente. Margarit, como se llama el restaurante, es otra prueba del hecho de que las cosas viejas deben sobrevivir a las nuevas y, en la medida de lo posible, convivir en armonía, sin daños. ¡Concrete Architectural Associates realmente logró hacer las cosas bien!
