Lo que define a esta residencia es la falta de detalles inusuales y extraordinarios, al menos visualmente. Es una simple casa blanca y eso es muy especial. La residencia está ubicada en Pato Branco en Brasil, en un sitio con pendiente que domina la ciudad y ofrece vistas panorámicas y sin obstrucciones del valle. Fue construido aquí por Barbara Becker Atelier Arquitetura.
La idea principal del proyecto era una casa que permitiera a sus propietarios relajarse y entretener a los amigos, y la estructura del edificio refleja eso. La casa está organizada en dos plantas. El nivel del suelo no contiene ningún espacio específico. Es un gran espacio abierto sin paredes para dividirlo del exterior. Esto le permite servir como un espacio multipropósito ideal para entretener a los invitados.
El piso superior contiene todas las funciones de la casa. El pasillo de entrada está conectado a las tres zonas principales. Tiene acceso a las habitaciones, al área social y también al área exterior. Está decorado con paredes blancas, un techo de concreto y baldosas con motivos rojos y blancos. Una lámpara colgante roja es el punto focal del pasillo.
La sala de estar, la cocina y el comedor forman un espacio social grande y abierto. Tienen grandes puertas corredizas de vidrio que revelan vistas panorámicas y sin obstrucciones de los alrededores y dejan pasar abundante luz natural a la vez que garantizan una ventilación natural dentro de la casa.
El diseño interior es sencillo. Las habitaciones tienen paredes blancas y suelos de colores claros. El techo es muy interesante. Está hecho de concreto y ha sido moldeado en su lugar. Tiene una textura distintiva similar a la madera que crea un bonito efecto visual, que agrega calidez a las habitaciones y engaña al ojo de una manera inesperada.
El mobiliario en toda la casa es a la vez práctico y atractivo. La cocina es mayoritariamente blanca. Cuenta con gabinetes minimalistas y modernos, una ventana amplia y un protector contra salpicaduras bajo que agrega un toque de color y patrón que realza la decoración. El baño es pequeño sin sentirse pequeño gracias al gran espejo y los azulejos blancos texturados en la pared.
