Para un fabricante de muebles o una empresa que trabaja en este campo, es muy importante saber cómo presentar sus productos y cómo atraer clientes. Las pequeñas empresas intentan aprender de las leyendas, a la vez que se distancian del modelo y tratan de obtener una personalidad propia.
Pero centrémonos en algo específico como IKEA, por ejemplo. Todos lo conocemos y conocemos su estrategia hoy. Sin embargo, sus catálogos no siempre parecen lo que son ahora. Es suficiente con echar un vistazo a las portadas de sus catálogos a partir de 1951 para comprender de dónde proviene su éxito. Incluso las primeras portadas mostraron que esta capacidad era única y atraía clientes sin revelar demasiado.
Me gusta la forma en que IKEA logra presentar algo tan común y simple siempre de una manera nueva, diferente a la habitual. Sus portadas de catálogo han cambiado con el tiempo. Pasaron de lo simbólico y lo misterioso a lo familiar y lo amistoso solo para volverse artísticos y familiares.