Este es un ejemplo de cómo puede adaptar características vintage para crear algo nuevo y elegante. No hay nada de malo en amar antigüedades. En realidad, es una cualidad que no muchas personas tienen. Esta maravillosa lámpara de mesa tiene un aspecto muy distinguido que definitivamente lo hará notar. Tiene un patrón de lirio de agua muy suave y hermoso, que, en combinación con el frágil vidrio sobre el que está pintado, crea una imagen artística que recuerda a los eternos vitrales.
Todo es especial, incluso puede que no lo parezca. No tiene una forma inusual y no está hecha de materiales o patrones extraños, pero aún así, tiene algo especial, algo inefable que no te puedes perder. Supongo que incluso podrías definirlo como extravagante en cierta medida. Es un artículo precioso que te lleva atrás en el tiempo. Es mucho más que una simple lámpara de mesa. Es una obra de arte que casi exige ser contemplada. Disponible por 224 $.
