Aquí, nuevamente, después de un largo descanso, les escribo sobre otra casa que me gusta y que considero inspiradora en términos de luz, flujo de aire y uso del arte. Keiji Ashizawa y Rie Honjo convirtieron lo que solía ser una residencia samurai en una casa ideal, que parece traer el paisaje al interior.
Ubicada en el centro de Tokio, esta casa parece respirar un aire especial, como si la combinación perfecta de arte y mobiliario quisiera enfatizar de nuevo lo que los japoneses son capaces de hacer. Tanto el entorno como el diseño de la casa tienen un impacto esencial en las personas que llegan a ver esta ubicación.
Uno de los aspectos impresionantes está representado obviamente por los jardines en cada piso de la casa; Esta idea de las cuatro estaciones reunidas en el mismo lugar proporciona diferentes luces y sentimientos para quienes presencian la vista espectacular. Donde quiera que mire, tiene la misma sensación de que los materiales, la luz, el aire y el espacio en su conjunto encajan perfectamente y, al mismo tiempo, los objetos de arte y los muebles funcionan juntos en la armonía más convincente que puede existir en una casa.
La compleja estructura de la casa parece irreal en la atmósfera donde los detalles y los colores hacen la regla y cada pequeño objeto es silencioso pero tan importante en su identidad única. El amplio espacio, la luz natural y el uso de la madera hacen que las habitaciones sean acogedoras y confortables, las escaleras prometen revelar aún más belleza, mientras que el paisaje ofrece una belleza natural perfecta. {Encontrado en Archdaily y fotos por Daici Ano}
